Este proyecto ha sido fruto de un trabajo meticuloso y colaborativo con el interiorista Francesc Pons, con quien compartimos una misma mirada: la de honrar el pasado sin renunciar a la comodidad y a la exigencia estética del presente. Hemos creado espacios acogedores que dialogan con la arquitectura del hotel y su personalidad mediterránea.
La suite grande dispone de dos habitaciones, dos baños y una zona de estar; la pequeña, de una habitación, un baño y un espacio cálido y funcional. Ambas se abren a un jardín privado, donde naturaleza e intimidad se encuentran.